El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha declarado BIC el Mausoleo de la Vizcondesa de Termens. Este anuncio aparece en el Decreto 199/2024, 3 de septiembre de 2024 y que se ha publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), Número 176, el martes 10 de septiembre de 2024.
¿Qué es un BIC?
El BIC (Bien de Interés Cultural) es una máxima figura de protección en el Catálogo General a nivel nacional. Un bien de patrimonio histórico debe tener una relevancia social e histórica y una singularidad para ser reconocido como BIC, así lo decreta la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985. El BIC es la máxima distinción que se le confiere a un bien a nivel nacional.
La declaración como Bien de Interés Cultural del Mausoleo supone una difusión del mismo por parte de la administración. Actualmente, se declaran BIC espacios como: monumentos históricos, conjuntos históricos, jardines históricos, sitios históricos y zonas arqueológicas. Cada comunidad autónoma ha añadido o modificado estas categorías, pero siempre de forma leve. Algunas comunidades han añadido nuevas categorías como: patrimonio industrial, vías culturales, parques arqueológicos, etc.
La denominación de Bien de Interés Cultural del Mausoleo de la Vizcondesa de Termens viene a aumentar el listado de BIC que encontramos en Cabra.
Bienes de Interés Cultural en Cabra (Córdoba):
- El Paraje Natural de la Fuente del Río.
- La Muralla.
- La Parroquia de la Asunción y Ángeles.
- Castillo de los Duques de Sessa.
- La Villa del Mitra.
- La Iglesia de San Juan Bautista del Cerro.
- Ermita del Calvario.
- Casa Natal de Juan Valera.
- Cueva de la Mina de Jarcas.
Entre otros bienes patrimoniales de nuestra ciudad.
El Mausoleo de la Vizcondesa de Termens declarado BIC
En este caso, estamos hablando de un monumento de carácter funerario de la Vizcondesa de Termens. Este mausoleo se encuentra dividido en dos elementos. La capilla funeraria original que se localiza en el cementerio municipal de San José. Y los elementos escultóricos principales que se localizan actualmente en la capilla de la Fundación Termens. Ambos conforman un conjunto histórico, artístico y cultural de la historia de Cabra.
El mausoleo al principio se situó en el cementerio municipal de San José, ya que Carmen Giménez quiso construir un panteón-capilla para albergar los restos de su familia. Corresponde a la definición de mausoleo, constaba con una parte arquitectónica, que albergaba la capilla y el acceso a los enterramientos, y otra parte escultórica, formada por el conjunto marmóreo de Carrara compuesto por los sepulcros de la vizcondesa y de sus padres, relieves y decoraciones.
Descripción de la capilla
La capilla, que aún se conserva en el cementerio, tiene una planta rectangular y se remata con una bóveda en la que se abre un óculo coronado por una estructura de hierro forjado con decoraciones fitomórficas, querubines, estrellas de seis puntas y una gran cruz, hoy desaparecida. El templete se levanta sobre un zócalo que arranca con pilastras y frisos decorativos sobre las puertas. El friso figuraba estar sostenido por cuatro parejas de ángeles de metal con guirnaldas de flores. Se encuentran dos tondos de metal situados en las puertas laterales que representan las efigies en relieve de José Giménez Flores y a Antonia Giménez Flores.
Junto a ocho placas de metal escenificando las obras de misericordia. Las falsas puertas laterales son gemelas y estaban adornadas por ángeles desnudos. La falsa puerta de la fachada reproducía otro relieve de la Anunciación, flanqueado por dos medios relieves a su derecha representando a San José y a su izquierda representando a San Juan Bautista. En el interior de la capilla se encontraba un altar dedicado a la Virgen del Carmen, con una imagen de la virgen sedente con un Niño de pie que sostiene el escapulario carmelita.
Grupo escultórico del Mausoleo de la Vizcondesa
El grupo escultórico se forma por tres lechos que simulan dormir el sueño eterno con las representaciones de la Vizcondesa de Termens y sus padres. La obra se remata con una estatua erguida que representa el alma de la promotora. Según Lara Arrebola, el concepto que se quiso representar es el “tránsito” de las almas de la Vizcondesa y de sus progenitores de la Iglesia Militante a la Iglesia Triunfante. Es por ello que aparecen divididas en dos grupos las esculturas y los relieves. En el exterior se simboliza las virtudes y los méritos que hicieron en vida y en el interior se representó el Segundo Paraíso, representado por el altar. El nexo entre uno y otro está constituido por la alegoría de la Vizcondesa.
Sin lugar a dudas, nos encontramos ante un grupo escultórico cargado de iconografía y simbolismos. Y su descripción en profundidad bien merece una visita a este espacio.
Descripción de la verja y de la capilla del Mausoleo
Tras la finalización del mausoleo se encarga una verja proyectada por Daverio, siendo una pieza representativa de las artes decorativas de finales del siglo XIX y principios del XX. Fue construida por Pulido en Segovia entre 1915 y 1916.
En 1931 los elementos escultóricos fueron desmontados y trasladados a la capilla funeraria de la Fundación Termens, creada por la Vizcondesa en el año 1930. En este templo se encuentra en su altar el tríptico de la Anunciación en bronce, San Juan Bautista y San José en mármol blanco, y el relieve del Padre Eterno, procedentes del mausoleo de Benlliure. La capilla funeraria se encuentra en un lateral de la nave del templo, separada por la verja diseñada por Daverio.
En esa capilla se instaló en el centro el conjunto escultórico de mármol, los sepulcros y la imagen alegórica de Carmen Giménez. En las paredes se disponen los relieves de bronce originales de Benlliure que representan obras de misericordia: “vestir al desnudo”, “dar posada al peregrino”, “consolar al triste y enterrar a los muertos”, “dar de comer al hambriento” y “perdonar las injurias”. A un lado del enterramiento, se encuentra el altar con la representación de la Virgen del Carmen en mármol, que presidía en el cementerio. A los lados de este altar, se encuentran dos puertas con dos ángeles desnudos en relieve que se encontraban en el primitivo monumento. Finalmente, en los ángulos se encuentran cuatro angelitos de bronce realizados por el escultor Alfredo Sanguinetti.
¿Quién fue la Vizcondesa de Termens?
Carmen Giménez Flores nació en Cabra el 21 de febrero de 1867. Era hija de José Giménez, conocido como el sanroqueño, y María de la Sierra Flores. A lo largo de su juventud la describen como una mujer humilde, trabajadora y con una indudable gracia y belleza. Comenzó trabajando como empleada del hogar, al igual que su madre. Siendo muy joven marchó a Madrid para trabajar en la casa de Juan Ulloa y Valera, pero allí conoció y cautivó a Antonio de Orleans y Borbón, duque de Galliera, hijo de los duques de Montpensier y hermano de la reina María de las Mercedes. El príncipe de Orleans estaba casado con la infanta doña Eulalia la Borbón, hermana del rey de España.
Carmen se convirtió en la amante del duque, durante más de 20 años, provocando que Eulalia se sintiese menospreciada. Antonio de Orleans pidió al rey, Alfonso XIII, que le concediera a Carmen el vizcondado de Termens basándose en una dudosa genealogía. En 1921, tras la ruptura con Antonio de Orleans se casó con Luis Gómez de Villavedón, militar y héroe de guerra. Tras cinco años de matrimonio, Luis se suicidó con un disparo al corazón.
La vizcondesa de Termens, también llamada “La Infantona”, tuvo numerosos regalos de su amante, entre ellos un palacete en Sanlúcar de Barrameda, las fincas El Botánico, joyas, obras de arte… entre ellos, destacamos su mausoleo situado en Cabra. Esta obra fue encargada en 1908 al artista realista, Mariano Benlliure por 200.000 pesetas, ejecutado en 1914 y concluido en 1915.
Por todo lo expuesto, se ha declarado BIC el Mausoleo de la Vizcondesa de Termens. Este espacio engloba una rica historia patrimonial, pero también es destacable la labor que la Vizcondesa realizó, ya que ordenó la construcción del Colegio de Educación Especial Niño Jesús, de la Fundación Termens.
Por último, destacar que las obras de arte son testimonio y legado histórico. El Mausoleo de la Vizcondesa de Termens nos ha permitido conocer una obra de tan insigne valor artístico. Sin olvidarnos de la principal protagonista, Carmen Giménez Flores, siendo una mujer que fue dueña de su propio destino y manejó su vida por encima de todos los convencionalismos imperantes.
Si desea visitar este espacio histórico y cultural ¡No dude en ponerse en contacto con nosotros!